En la ciudad de Barcelona a veinte y cuatro de Febrero de mil ochocientos cuarenta y nueve. Ante mi el notario y testigos nombraderos compareció D. Miguel Rovira y Sugues ladrillero, vecino del barrio de Gracia, el cual de su espontanea voluntad confiesa a D. Joaquin Castañer popietario, vecino de esta ciudad que por titulo de establecimiento perpetuo a su favor otorgado por D. Francisco Alsina y Forn y D. Isidro Juan Pla albañiles vecinos también del barrio de Gracia, tiene y posehe un pedazo de terreno para edificar casas sito en el termino de Sarriá que forma el solar número diez y mitad del once, en el plano que a este efecto se ha levantado, de tenida de ahco cuarenta y cinco palmos a razón de treinta palmos por solar y de fondo desde mediodia a cierzo por la parte de levante doscientos catorce paomos y por la parte de poniente doscientos nueve todo poco mas o menos enscluso en ellos el grueso de las paredes. El que linda a oriente con la mitad del solar número once; a mediodia con la carretera o calle que allí ecsiste; a poniente con el solar número nueve; y a cierzo con honores del Señor D. Joaquin Castañer, cuyo terreno junto con otro pedazo de mayor estensión del que es parte se tiene en dominio directo del referido Señor de Castañer al censo de cien libras catalanas annualmente pagadero por mitad en los dias de San Juan de Junio y Navidad, cuyo censo viene a cargo de los Señores estabilientes según así se espresa en la citada escritura de establecimiento recibida ante D. José Ponsa y Figuerola notario publico del número y colegio de Barcelona a catorce Enero del corriente año, todo lo que afirma ser verdad. En cuyo testimonio conocido de mi el notario lo oorga y firma, siendo testigos D. Francisco Javier Giró y D. José Maria Forns de esta vecindad.
Miquel Rovira y Sagues, Ante mi Fernando Moragas y Ubach notario.