En la ciudad de Barcelona a treinta Junio de mil ochocientos cincuenta y cuatro. Sepase como D. Joaquin Castañer, propietario, natural y vecino de esta ciudad, de su espontanea voluntad firma por razón de dominio la escritura de establecimiento perpetuo otorgada por Mateo Marques, Pedro Caballé, Ignacio Caballé y Juan Ferrer a favor de Tomas Caballé vecino de esta dicha ciudad, de un pedazo de terreno de tenida de ancho de oriente a poniente sesenta palmos y de profundidad de medio dia a cierzo ciento treinta y dos poco mas o menos, sito en el termino de San Gervasio que antes era de Sarriá, lindante a oriente con la calle nombrada de la Cruz; a mediodía con la plaza del mismo nombre; a poniente con Ignacio Serrallach; y a cierzo con los estabilientes, cuyo terreno se tiene en dominio y alodio directo del Señor otorgante con prohibición de imponer ningun otro, al censo puesto con el restante terreno de que es parte, de ciento sesenta y cinco libras catalanas, todos los años pagadero por mitad en los días de San Juan de Junio y Navidad, debiendo quedar salvo y seguro tanto sobre la totalidad del terreno como sobre cada una de sus partes. Salvos los censos, laudemios y demás derechos dominicales tal vez debidos y no satisfechos. Confesando recibir nueve sueldos por derechos de la presente firma. En cuyo testimonio conocido del mi el notario lo otorga y firma, siendo testigos D. Francisco J. Giró y D. Pablo Parés de esta vecindad.
No se ha firmado, Fernando Moragas y Ubach notario.